QUE NO SEA PARA QUEDARSE

Enfrenta ya Querétaro el problema del narcotráfico

Por Luis del Toro
Domingo 22 de abril/2007

Querétaro enfrenta ya el problema del narcotráfico, del cual el narcomenudeo es sólo una fase, coincidieron diversos analistas tras analizar los hechos que se han venido dando en la entidad. Oscar Lozano Andrade, especialista en Ciencias Forenses, manifestó que en Querétaro hay señales claras de que somos parte de la producción, la distribución y el consumo, con las cadenas de ilícitos que implica su desarrollo, por lo que consideró que en su percepción, “nos enfrentamos al narcotráfico”. Francisco Perrusquía Monroy, Coordinador de Humanidades de la Universidad Autónoma de Querétaro, manifestó que “narcotráfico y narcomenudeo son la misma cosa, en tanto que forman parte de un mismo proceso”. Dijo que se puede decir con precisión que “padecemos ambos”, tanto el narcotráfico como el narcomenudeo, lo que implica la operación de toda la cadena.
Para el empresario Carlos H. Bustón hablar de narcomenudeo supone el narcotráfico, sobre todo cuando los operativos que se están realizando han permitido detectar una infraestructura de abasto y armamento que en rigor no corresponde a una operación en una pequeña escala, como sería la de un vendedor de droga de oportunidad. Abundó que lo que debemos de hacer es evaluarnos y determinar qué se puede hacer, en materia de educación, prevención, y por lo que hace a las autoridades, la persecución del ilícito.
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El narcotráfico en el estado no instauró sus operaciones recientemente en el estado, fue desde hace por lo menos cuatro años que empezó a intensificar su actividad aunque no de manera significativa, creó un mercado discreto y muy gradualmente lo fue fortaleciendo mientras las autoridades insistían que Querétaro “era una estado de paso de la droga, no de consumo”.
Eso pasa por estar ocupados en otras cuestiones menos en lo que deben. Si bien su incremento (del narcotráfico) fue casi imperceptible, si llegó un momento en que muchos ciudadanos sabían de por lo menos un punto de venta de drogas, situación que debió de haber prendido los focos de alarma desde hace muchos, pero muchos meses.
Es cierto también que hubo muchos cierres de estos lugares donde se comercializaba la droga, pero por uno que se cerraba, dos o tres eran abiertos, los adictos aumentaron y con ellos, el mercado, las grandes mafias comenzaron a ver con buenos ojos esto y se asentaron aquí.
Ahora, si en este momento hay ejecuciones, no es porque se haya intensificado el combate contra estas mafias, es porque el mercado de consumo ha aumentado considerablemente y es peleado a muerte por las diferentes bandas instauradas ya en nuestro estado.
En fin, muchos fueron los indicadores que permitían vislumbrar esta situación, ahora lo que queda es cerrar filas para evitar que aumente este cáncer el cual, estamos a tiempo de si bien no erradicar, sí controlar y evitar su crecimiento.