ASÍ VAN

Hasta el momento, las campañas políticas en Querétaro se vienen realizando tal y como se esperaban.
Por un lado, los candidatos del PAN, Manuel González Valle y Francisco Domínguez Servién, que buscan la gubernatura del estado y la presidencia municipal de Querétaro, respectivamente, se encuentran inmersos en una campaña netamente mediática.
Sus vagas propuestas no encuentran apoyo entre la ciudadanía y han tenido que recurrir a montajes escénicos para dar la impresión de que las cosas van viento en popa.
Sin embargo, las cosas se les están complicando y si no logran reorientar el camino, pueden llegar a sucumbir, lo que significaría un verdadero desastre para el panismo nacional.
Para PRI con José Calzada Rovirosa, las cosas no son mejores; con sus propuestas, está tratando de arrancarle algunos votos a los partidos de izquierda; sin embargo, no cuenta con la legitimidad ni credibilidad suficiente para poder lograrlo.
Su fuerza sigue radicando en el corporativismo, el viejo sistema que durante tanto tiempo los mantuvo en el poder; pero las cosas no son igual que antes y los liderazgos anquilosados del sindicalismo queretano, principalmente, están demasiado desgastados y poco le podrán aportar si el priista no logra llegar hasta la misma base trabajadora, que es la que realmente cuenta.
El PRD va en caída libre, pues aparte de que sus candidatos a la gubernatura del estado y a la presidencia municipal capitalina no cuentan con presencia alguna entre la ciudadanía queretana, sus líderes locales siguen entrampados en las rebatingas, sin contar con proyecto de partido, y mucho menos, de gobierno.
Aunado a lo anterior, su líder nacional, Jesús Ortega Martínez, parece estar empeñado en acabar de sumir a este deshilachado instituto político, tratando en sus promocionales a los electores como niños, patético.
El partido Convergencia, sigue con la dinámica caciquil que tantos beneficios le ha dejado al selecto grupo que lo comanda; buscaron a un empresario tan solvente como ingenuo para plantarlo como candidato a la presidencia municipal de Querétaro, con el fin de que sea él quien invierta en su campaña y a la vez, promueva al partido.
Pero los espacios que, con seguridad obtendrán, son asignados (agandallados) por los mismos de siempre: Aguilera Rico, diputado local en la pasada legislatura local y actualmente diputado federal, vuelve pos sus fueros (léase pedazo de pastel); se inscribe como candidato a diputado local por el IV Distrito, y como sabe que no conseguirá el triunfo, también se apunta en el primer lugar de las plurinominales.
Por su parte, Marco Antonio León Hernández, actualmente diputado local, es enlistado en el primer lugar para las regidurías, también plurinominales.
El PT se encuentra en una etapa de renovación y es, sin duda, el partido que mejores candidatos y propuestas presenta ante la ciudadanía.
La mayoría de sus candidatos, son identificados plenamente por su liderazgo y activismo político-social y cuentan (como no lo tienen los candidatos de otros partidos) con el perfil necesario para ser nuestros representantes y formar así el contrapeso tan urgido en nuestro estado, ante los embates de los gobiernos elitistas del PAN coludidos con el PRI.
A pesar de las fanfarronas declaraciones de González Valle y de Domínguez Servién, donde el primero dijo que van 15 puntos arriba de su más cercano perseguidor y el segundo, que van a ganar 3 a 1, creo que lo hacen más por nervios que por certeza y eso será más notable en cuanto esté más cerca la fecha de las votaciones.