Se queja un oficial de intimidación
Miércoles 07 de marzo/2007
Por Fidel Favela
La denuncia realizada contra algunos mandos de la Guardia Municipal por el oficial Daniel Careta Jasso, según él han tenido repercusiones. Además de que aseguró intentan hacerle desesperar en sus labores, e incluso realizando llamadas a familiares. “Ya me cambiaron, antes estaba de jefe de turno y ahora en las listas aparezco como escolta, además de que hace rato me iban a mandar a un servicio con una arma que no me corresponde, aunque mi permiso ya está vencido, yo me negué a aceptar la otra”, dijo el oficial Careta.
A decir de su abogada, Susana Careta Jasso, al llegar a la delegación Félix Osores, le fue impedido el paso para llegar hasta donde estaba su hermano. “Cuando llegué lo metieron en ese cuarto (señalando en donde estaba al policía) y me cerraron la puerta en la cara, para que no pudiera hablar con él”, afirma la hermana del oficial.
El oficial denunció que cuando Raúl Luna supo que estarían los medios en las instalaciones, la metieron para que no hablara.
“Después de que Raúl Luna me cerró la puerta, me dejó como una hora afuera en la calle de Tarahumaras, hasta que supieron que iban a venir los medios, me volvieron a meter para que no dijera nada”, denunció Careta Jasso.
Dijo que al no aceptar un arma que no era la que él tenía a su cargo, lo mandaron primero sin una y después lo regresaron por no traer pistola.
“Cuando regresé me empezaron a grabar con una (cámara) de video en contra de mi voluntad, la verdad es que no sé para qué, pues tienen fotos mías y todo, después me dijeron que si no iba a aceptar el arma me fuera sin nada, entonces me subía a la unidad 421 y antes de que saliera me regresaron porque no tenía arma”.
Dijo que pidieron a sus compañeros que firmaran una tarjeta informativa en donde se especifica que él no quiso el arma, cosa que sus compañeros se negaron a realizar.
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Lo único que han hecho tanto el secretario del gobierno municipal como el marrano franquista de Amadeo Marranares, es descalificar el dicho del oficial y exigirle presente las pruebas o de lo contrario, -con tono de amenaza- se le aplicará todo el rigor de la ley.
Estas declaraciones han sido avaladas por el otro baturro españolote de González Valle, cerrando una pinza que protege las añejas prácticas de corrupción que permean en la corporación policíaca y que los panistas con todo y su “santurrones” no han podido exterminar y por el contrario, han terminado por coludirse y dirigir la misma.
Es sumamente delicada esta situación, que los encargados de brindarnos seguridad en su último nivel, no les sea proporcionada ésta a ellos mismos para la realización óptima de sus labores, aparte de ni siquiera darle los insumos necesarios, ahora se les hostiga y persigue por señalar las porquería que mandos superiores cometen en su contra, acoso sexual entre otras linduras que estos cerdos cometen y que son solapados y encubiertos por los altos directivos del municipio, incluyendo al presidente municipal de la entidad.
Todos por Querétaro, un simple eslogan publicitario que no corresponde a la realidad.
A decir de su abogada, Susana Careta Jasso, al llegar a la delegación Félix Osores, le fue impedido el paso para llegar hasta donde estaba su hermano. “Cuando llegué lo metieron en ese cuarto (señalando en donde estaba al policía) y me cerraron la puerta en la cara, para que no pudiera hablar con él”, afirma la hermana del oficial.
El oficial denunció que cuando Raúl Luna supo que estarían los medios en las instalaciones, la metieron para que no hablara.
“Después de que Raúl Luna me cerró la puerta, me dejó como una hora afuera en la calle de Tarahumaras, hasta que supieron que iban a venir los medios, me volvieron a meter para que no dijera nada”, denunció Careta Jasso.
Dijo que al no aceptar un arma que no era la que él tenía a su cargo, lo mandaron primero sin una y después lo regresaron por no traer pistola.
“Cuando regresé me empezaron a grabar con una (cámara) de video en contra de mi voluntad, la verdad es que no sé para qué, pues tienen fotos mías y todo, después me dijeron que si no iba a aceptar el arma me fuera sin nada, entonces me subía a la unidad 421 y antes de que saliera me regresaron porque no tenía arma”.
Dijo que pidieron a sus compañeros que firmaran una tarjeta informativa en donde se especifica que él no quiso el arma, cosa que sus compañeros se negaron a realizar.
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Lo único que han hecho tanto el secretario del gobierno municipal como el marrano franquista de Amadeo Marranares, es descalificar el dicho del oficial y exigirle presente las pruebas o de lo contrario, -con tono de amenaza- se le aplicará todo el rigor de la ley.
Estas declaraciones han sido avaladas por el otro baturro españolote de González Valle, cerrando una pinza que protege las añejas prácticas de corrupción que permean en la corporación policíaca y que los panistas con todo y su “santurrones” no han podido exterminar y por el contrario, han terminado por coludirse y dirigir la misma.
Es sumamente delicada esta situación, que los encargados de brindarnos seguridad en su último nivel, no les sea proporcionada ésta a ellos mismos para la realización óptima de sus labores, aparte de ni siquiera darle los insumos necesarios, ahora se les hostiga y persigue por señalar las porquería que mandos superiores cometen en su contra, acoso sexual entre otras linduras que estos cerdos cometen y que son solapados y encubiertos por los altos directivos del municipio, incluyendo al presidente municipal de la entidad.
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