BOMBARDIER.... QUE SE VAYA A VOLAR

Acusan de engaño a Bombardier

Por Agencia Reforma
Martes 24 de abril/2007

La llegada de Bombardier a Querétaro para crear mano de obra especializada mexicana en la construcción de aviones resultó un engaño para los trabajadores, denuncian ex empleados. La empresa canadiense en menos de un año de operación ya enfrenta problemas laborales, luego de que incumplió diversos acuerdos en salarios y certificaciones. Carlos Alberto Álvarez, ex empleado de la empresa, denunció que Bombardier prometió sueldos de entre 9 mil 500 y 10 mil pesos mensuales, salarios que nunca pagó, ya que el sueldo máximo es de 5 mil pesos. “Mientras en Canadá pagan a 25 dólares la hora, aquí nos pagan a 20 dólares el día en promedio”, dijo. Cuando el Gobierno federal anunció el proyecto, se informó públicamente que el personal que contrataría sería capacitado en el Centro Universitario Técnico de Querétaro, donde a su vez habría profesores capacitados por Bombardier, cuando egresaran podrían trabajar en la empresa. Sin embargo, esto también fue una verdad a medias, ya que algunos trabajadores fueron rechazados. De acuerdo con el ex empleado, la capacitación era de cuatro meses, tres de ellos en el Centro y uno en el área de producción de la empresa sin goce de sueldo.

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Esto es el resultado de los costosos viajes al extranjero hechos lo mismo por el gobernador que por el presidente municipal actual y el anterior, justifican el despilfarro de recursos públicos con el cuento de atraer inversión que resulta en regalías para el gran kapital, inversionistas que se aprovechan de la pobreza en que se encuentra gran parte de la ciudadanía para ofrecerle paupérrimos salarios y condiciones desventajosas de trabajo.
Esta es la gran apuesta laboral del gobierno panista y que desmedidamente han publicitado como la panacea para el desempleo, trajeron, cierto, una empresa internacional y de amplio renombre, pero lo hicieron en base a otorgarles prebendas totalmente inclinadas a proteger sus intereses a costa de la explotación de los obreros de dicha empresa.
No conformes con esto, cerraron la pinza creando una carrera en la Universidad Tecnológica la cual, especializará a técnicos para laborar en la antes mencionada empresa canadiense, sin que haya garantía de que todo egresado tendrá lugar en las filas en esta corporación además de que le ahorra a la misma el costo de capacitación a los TÉCNICOS que una vez que lo han hecho en la UTEC, ingresarán al emporio aeronáutico.
Es una pena que la empresa no cumpla los compromisos contraídos previamente con sus trabajadores contratados, pero es una vergüenza que el gobierno no sólo se quede impávido ante tal situación, sino que en contubernio con los inversionistas permite estas prácticas represivas contra el sector (cómo siempre) más desprotegido.