El otro Querétaro de la Alerta Máxima
(Primera parte)
ROBOS SUPERIORES A LOS 800 MIL PESOS, MILITARES ASALTADOS, Y ‘APARICIÓN’ DE CADAVERES CON HUELLAS DE TORTURA, SON PARTE DE LOS ‘RESULTADOS’ ARROJADOS TRAS POCO MÁS DE 365 DÍAS DEL ANUNCIO GUBERNAMENTAL.
Por Carlo Daniel Aguilar González
Tribuna de Querétaro 26 de Mayo de 2008 – Año XII – No. 452
Primer acto: Minutos después de las 7 de la mañana, al salir de su domicilio le arrebatan mercancía valuada en 800 mil pesos (en oro puro) a un joyero. Lo suben a un automóvil, lo privan de su libertad, lo meten a la cajuela y lo abandonan en la carretera. Segundo acto: en la intersección de dos de las principales vialidades de la capital y a plena luz del día, asaltan con lujo de violencia a una familia. Les cierran el paso, los obligan a bajar del vehículo en que viajaban, loes roban sus relojes de pulso, y los delincuentes huyen sin ser capturados.
Tercer acto: Cuando las manecillas del reloj marcan las 9 de la mañana, un funcionario de la empresa Gramer Mexicanos es acribillado en su domicilio. Dos impactos de bala calibre .25 terminan con su vida. Cuarto acto: el mismo día que el representante del Sistema Nacional de Seguridad Pública entrega ‘apoyos’ por 103 millones de pesos, un grupo armado “ultima a tiros a un comerciante”. Se encuentran tres casquillos 9 milímetros cerca del cadáver.
¿Cómo se llamó la obra?... El Querétaro de la Alerta Máxima.
Con base en una investigación hemerográfica realizada por Tribuna de Querétaro, en la que se consultaron los principales periódicos locales entre mayo de 2007 y mayo de 2008, y se ‘recopilaron’ los acontecimientos que han tenido vínculo con la seguridad pública; la delincuencia no solamente mantiene su ‘variedad’ de formas para atacar el tejido social queretano, sino que la ‘falta el respeto’ a las palabras emitidas por las autoridades.
Lo mismo robos a cajeros automáticos por montos superiores a los 700 mil pesos, que explosiones que provocan llamaradas de 10 metros de diámetro y 50 metros de altura, pasando por ‘apariciones’ de cadáveres en carreteras (con las manos atadas y evidencias de múltiples golpes), homicidios a plena luz del día o militares asaltados mientras transitan por la ciudad, en Querétaro el crimen no cede.
A pesar de los exhortos del vocero de la Diócesis de Querétaro, José Morales Flores, para que “no haya impunidad” (viernes 11 de mayo de 2007), y de los retirados anuncios de que se intensificarán los operativos de seguridad, los delincuentes exhiben múltiples facetas para lograr que, en la mayoría de los casos, no sean capturados.
Después de poco más de 365 días en que fue decretada, Tribuna de Querétaro muestra el saldo que ha arrojado la Alerta Máxima pronunciada en abril de 2007 por el titular del Ejecutivo local. Entre los resultados se puede contabilizar un secretario de Seguridad Pública removido en la capital del estado.
>>Mayo 2007: ni siquiera a los emisarios de Seguridad Pública y militares respetaron
Mayo de 2007. No se han cumplido 15 días del anuncio hecho por Francisco Garrido Patrón, cuando Diego Omar Ramírez Estrada pierde la vida en una balacera suscitada en la colonia Las Américas. El periódico Noticias consignó que el occiso fue ultimado por un grupo de Jóvenes (producto de una riña), y que su velorio se llevó a cabo al interior de su domicilio.
Tres días después, mientras hacía sus compras dominicales en compañía de su familia, el abogado Pedro Septién Barrón es “agredido a puñaladas” en conocido comercio de avenida Constituyentes. Los agresores huyen del lugar.
Viernes 18 de mayo. Acompañado de Alfredo Botello Montes, Roberto Campa Cifrián, secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, anuncia la entrega de 103 millones de apoyo para el combate a la delincuencia en Querétaro. Apenas unas horas más tarde, la colonia Unión Magisterial es testigo del asesinato de un comerciante, victimado por un grupo armado (periódico Noticias, 19 de mayo de 2007).
Para ‘concluir’ el primer me4s de la Alerta Máxima, un militar es asaltado y despojado de su dinero en las calles de la colonia Lomas de Casa Blanca (30 de mayo).
>>Explosiones de Pemex y robos superiores a 200 mil pesos, en menos de 15 días.
4 de junio de 2007. se desarrolla otra persecución en la autopista México-Querétaro, en la que muere uno de los asaltantes que había robado una camioneta en territorio capitalino. La Policía Investigadora Ministerial lo perseguía.
13 de junio de 2007. Aparece en canal para agua pluvial, en el camino hacia el viejo aeropuerto, el cuerpo sin vida de un hombre. El occiso presenta explosión de vísceras y golpes, además de que es encontrado parcialmente vestido.
26 de junio de 2007. Por segunda ocasión en dos meses, es robado el cajero de una sucursal bancaria Banamex en el bulevar Bernardo Quintana. Se estima que los ladrones se llevaron un monto entre 200 y 400 mil pesos (Noticias, 27 de junio).
En la madrugada del 10 de julio de 2007, ocurren explosiones en los ductos de Petróleos Mexicanos, en la comunidad de Ceja de Bravo (municipio de Villa Corregidora). Desde distintos puntos de la ciudad, se observan las llamas provocadas por el siniestro, que alcanzan 10 metros de diámetro y 50 metros de altura, según publicaron los periódicos locales en su edición del mismo día. El 11 de julio, se anuncia que la Procuraduría General de la República (PGR) atrae la investigación.
24 horas después de las explosiones, es asesinado en el interior de su domicilio José Bonifacio Díaz Serrano, funcionario de la empresa Gramer Mexicanos. Cuando se disponía a abordar su automóvil y dirigirse al trabajo, dos impactos de bala calibre .25 terminan con su existencia, en su domicilio de la colonia Álamos.
El jueves 12 de julio, delincuentes “saquean” joyería del Centro Histórico, logrando un botín superior a los 800 mil pesos. No se da con los responsables. En agosto el sacerdote José Morales Flores admite que “Querétaro ya no es una ciudad segura”. Sin embargo, durante este mes hay una ‘tregua’ de la delincuencia.
>>Septiembre 2007: familias completas asaltadas y ‘aparición’ de cadáveres
Para septiembre, el crimen ‘arremete’ de nueva cuenta contra las autoridades. El jueves 3, una familia es asaltada con lujo de violencia mientras transita cerca de la Plaza de Toros Santa María, en las inmediaciones del “trébol” formado en la esquina de las avenidas 5 de Febrero y Constituyentes. Les cierran el paso, los bajan del automóvil, les quitan sus relojes de pulso, y los delincuentes huyen.
El viernes 7, la empresa Effem de México sufre un robo superior a los 92 mil pesos. El lunes 10, delincuentes ingresan a la casa del párroco Rosendo Zavala Herrera en la comunidad de Amazcala, El Marqués, y se llevan 100 mil pesos. El martes 11, aparece el cuerpo de un hombre en el camino que va de Galindo hacia Los Cues. El cadáver presenta múltiples golpes, las manos atadas y un cable atado al cuello, de acuerdo a información consignada el martes 12 por el periódico Noticias.
(Primera parte)
ROBOS SUPERIORES A LOS 800 MIL PESOS, MILITARES ASALTADOS, Y ‘APARICIÓN’ DE CADAVERES CON HUELLAS DE TORTURA, SON PARTE DE LOS ‘RESULTADOS’ ARROJADOS TRAS POCO MÁS DE 365 DÍAS DEL ANUNCIO GUBERNAMENTAL.
Por Carlo Daniel Aguilar González
Tribuna de Querétaro 26 de Mayo de 2008 – Año XII – No. 452
Primer acto: Minutos después de las 7 de la mañana, al salir de su domicilio le arrebatan mercancía valuada en 800 mil pesos (en oro puro) a un joyero. Lo suben a un automóvil, lo privan de su libertad, lo meten a la cajuela y lo abandonan en la carretera. Segundo acto: en la intersección de dos de las principales vialidades de la capital y a plena luz del día, asaltan con lujo de violencia a una familia. Les cierran el paso, los obligan a bajar del vehículo en que viajaban, loes roban sus relojes de pulso, y los delincuentes huyen sin ser capturados.
Tercer acto: Cuando las manecillas del reloj marcan las 9 de la mañana, un funcionario de la empresa Gramer Mexicanos es acribillado en su domicilio. Dos impactos de bala calibre .25 terminan con su vida. Cuarto acto: el mismo día que el representante del Sistema Nacional de Seguridad Pública entrega ‘apoyos’ por 103 millones de pesos, un grupo armado “ultima a tiros a un comerciante”. Se encuentran tres casquillos 9 milímetros cerca del cadáver.
¿Cómo se llamó la obra?... El Querétaro de la Alerta Máxima.
Con base en una investigación hemerográfica realizada por Tribuna de Querétaro, en la que se consultaron los principales periódicos locales entre mayo de 2007 y mayo de 2008, y se ‘recopilaron’ los acontecimientos que han tenido vínculo con la seguridad pública; la delincuencia no solamente mantiene su ‘variedad’ de formas para atacar el tejido social queretano, sino que la ‘falta el respeto’ a las palabras emitidas por las autoridades.
Lo mismo robos a cajeros automáticos por montos superiores a los 700 mil pesos, que explosiones que provocan llamaradas de 10 metros de diámetro y 50 metros de altura, pasando por ‘apariciones’ de cadáveres en carreteras (con las manos atadas y evidencias de múltiples golpes), homicidios a plena luz del día o militares asaltados mientras transitan por la ciudad, en Querétaro el crimen no cede.
A pesar de los exhortos del vocero de la Diócesis de Querétaro, José Morales Flores, para que “no haya impunidad” (viernes 11 de mayo de 2007), y de los retirados anuncios de que se intensificarán los operativos de seguridad, los delincuentes exhiben múltiples facetas para lograr que, en la mayoría de los casos, no sean capturados.
Después de poco más de 365 días en que fue decretada, Tribuna de Querétaro muestra el saldo que ha arrojado la Alerta Máxima pronunciada en abril de 2007 por el titular del Ejecutivo local. Entre los resultados se puede contabilizar un secretario de Seguridad Pública removido en la capital del estado.
>>Mayo 2007: ni siquiera a los emisarios de Seguridad Pública y militares respetaron
Mayo de 2007. No se han cumplido 15 días del anuncio hecho por Francisco Garrido Patrón, cuando Diego Omar Ramírez Estrada pierde la vida en una balacera suscitada en la colonia Las Américas. El periódico Noticias consignó que el occiso fue ultimado por un grupo de Jóvenes (producto de una riña), y que su velorio se llevó a cabo al interior de su domicilio.
Tres días después, mientras hacía sus compras dominicales en compañía de su familia, el abogado Pedro Septién Barrón es “agredido a puñaladas” en conocido comercio de avenida Constituyentes. Los agresores huyen del lugar.
Viernes 18 de mayo. Acompañado de Alfredo Botello Montes, Roberto Campa Cifrián, secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, anuncia la entrega de 103 millones de apoyo para el combate a la delincuencia en Querétaro. Apenas unas horas más tarde, la colonia Unión Magisterial es testigo del asesinato de un comerciante, victimado por un grupo armado (periódico Noticias, 19 de mayo de 2007).
Para ‘concluir’ el primer me4s de la Alerta Máxima, un militar es asaltado y despojado de su dinero en las calles de la colonia Lomas de Casa Blanca (30 de mayo).
>>Explosiones de Pemex y robos superiores a 200 mil pesos, en menos de 15 días.
4 de junio de 2007. se desarrolla otra persecución en la autopista México-Querétaro, en la que muere uno de los asaltantes que había robado una camioneta en territorio capitalino. La Policía Investigadora Ministerial lo perseguía.
13 de junio de 2007. Aparece en canal para agua pluvial, en el camino hacia el viejo aeropuerto, el cuerpo sin vida de un hombre. El occiso presenta explosión de vísceras y golpes, además de que es encontrado parcialmente vestido.
26 de junio de 2007. Por segunda ocasión en dos meses, es robado el cajero de una sucursal bancaria Banamex en el bulevar Bernardo Quintana. Se estima que los ladrones se llevaron un monto entre 200 y 400 mil pesos (Noticias, 27 de junio).
En la madrugada del 10 de julio de 2007, ocurren explosiones en los ductos de Petróleos Mexicanos, en la comunidad de Ceja de Bravo (municipio de Villa Corregidora). Desde distintos puntos de la ciudad, se observan las llamas provocadas por el siniestro, que alcanzan 10 metros de diámetro y 50 metros de altura, según publicaron los periódicos locales en su edición del mismo día. El 11 de julio, se anuncia que la Procuraduría General de la República (PGR) atrae la investigación.
24 horas después de las explosiones, es asesinado en el interior de su domicilio José Bonifacio Díaz Serrano, funcionario de la empresa Gramer Mexicanos. Cuando se disponía a abordar su automóvil y dirigirse al trabajo, dos impactos de bala calibre .25 terminan con su existencia, en su domicilio de la colonia Álamos.
El jueves 12 de julio, delincuentes “saquean” joyería del Centro Histórico, logrando un botín superior a los 800 mil pesos. No se da con los responsables. En agosto el sacerdote José Morales Flores admite que “Querétaro ya no es una ciudad segura”. Sin embargo, durante este mes hay una ‘tregua’ de la delincuencia.
>>Septiembre 2007: familias completas asaltadas y ‘aparición’ de cadáveres
Para septiembre, el crimen ‘arremete’ de nueva cuenta contra las autoridades. El jueves 3, una familia es asaltada con lujo de violencia mientras transita cerca de la Plaza de Toros Santa María, en las inmediaciones del “trébol” formado en la esquina de las avenidas 5 de Febrero y Constituyentes. Les cierran el paso, los bajan del automóvil, les quitan sus relojes de pulso, y los delincuentes huyen.
El viernes 7, la empresa Effem de México sufre un robo superior a los 92 mil pesos. El lunes 10, delincuentes ingresan a la casa del párroco Rosendo Zavala Herrera en la comunidad de Amazcala, El Marqués, y se llevan 100 mil pesos. El martes 11, aparece el cuerpo de un hombre en el camino que va de Galindo hacia Los Cues. El cadáver presenta múltiples golpes, las manos atadas y un cable atado al cuello, de acuerdo a información consignada el martes 12 por el periódico Noticias.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario