DE LA REVISTA BUZOS

El Yunque, la ultraderecha en Querétaro

Por Minerva Flores

Él mismo lo califica como un “tema incómodo, polémico y controvertido… sabemos de las raíces conservadoras de Querétaro”; pero, asume su compromiso periodístico y, en una investigación minuciosa, desentraña los orígenes de la ultraderecha en Querétaro, como “un pequeño aporte para que los queretanos podamos entender un poco el momento político que hoy vivimos, latente en la presencia de los miembros más representativos de organización El Yunque en posiciones importantes dentro del ámbito político y dentro de la administración pública del estado”.

Más allá de la investigación que el periodista Lauro Jiménez Jiménez ofrece en su libro de reciente publicación El Yunque, la ultraderecha en Querétaro, en que deja al descubierto, con datos precisos, sustentados en testimonios y documentos varios, la iniciación en El Yunque, desarrollo y acciones de un grupo de jóvenes queretanos durante las décadas de los 70 y 80, en la entrevista exclusiva que ofrece a buzos, el autor reflexiona sobre cómo la ultraderecha gobierna Querétaro, ahora que los otrora jóvenes están incrustados en el aparato administrativo del gobierno queretano.

Actividades de El Yunque queretano

De acuerdo con la investigación, la acción de los miembros de El Yunque en Querétaro se da, fundamentalmente, durante los años 70 y 80, cuando participan en diversas actividades en defensa de la formación religiosa en la enseñanza y en contra de eventos que, según ellos, atentaran contra la moral.

Ejemplo de ello, refiere Jiménez en la página 115 de su obra, es el sabotaje que un grupo de jóvenes identificados como militantes del ultraderechista Movimiento Universitario de Renovadora Orientación (MURO) realizó en 1969 en contra de la puesta en escena de “Hair” por considerar que lastimaba los principios de la decencia: “… el estreno se empañó con la inesperada presencia de varios de sus compañeros, quienes, en una acción rápida y bien orquestada, colocaron en el interior del recinto una gran cantidad de bolsas de amoníaco y gas lacrimógeno (…). Los autores de dicha acción fueron, entre otros: José Víctor Ortiz Montes (…), Simón Guerrero Contreras, Felipe Urbiola Ledesma, Alfredo Botello Montes, Francisco Mendoza Negrete y Jesús Carlos Hernández”, todos ellos identificados con el MURO.

Posteriormente, se registró el hecho que relató por primera vez el periodista Álvaro Delgado en su libro El Yunque. La ultraderecha en el poder, también documentado en el libro de Jiménez Jiménez, acerca de la participación -el 12 de mayo de 1977- de un comando juvenil queretano de El Yunque, al frente del cual estuvo el actual secretario de Gobierno de Querétaro, Alfredo Botello Montes, en un conflicto estudiantil suscitado en la ciudad de Zacatecas, y que tenía como propósito impedir que fuera entorpecida una manifestación anticomunista.

La detención de dos miembros del grupo, liderado por Botello Montes, sacó a la luz pública la existencia de ese grupo de ultraderecha en Querétaro que estaba dirigido en el estado por Arturo Nava Bolaños.

La ultraderecha penetra al PAN

El investigador indica que en los 80, nacionalmente, pero también en Querétaro, a través de sus organizaciones de fachada, como las denomina Álvaro Delgado -la Asociación Nacional Cívica Femenina (ANCIFEM), Desarrollo Humano Integral y Acción Ciudadana (DHIAC), cuyo dirigente es el actual subsecretario de Desarrollo Político, Jesús Carlos Hernández Martínez, entre otras-, la ultraderecha penetra al Partido Acción Nacional (PAN).

“En aquel tiempo -apunta Lauro Jiménez- la figura más prominente de estas organización del yunquismo es Arturo Nava Bolaños, y es entonces cuando la ultraderecha comienza a penetrar en el PAN, en sus estructuras y en sus dirigencias -tanto a nivel municipal como estatal-, en busca de un propósito muy claro, muy definido, en busca del poder, en este caso, la gubernatura del estado”. En 1991, Arturo Nava Bolaños es postulado por el PAN-Yunque como candidato al Gobierno del Estado.

Al no obtener el triunfo el PAN con Arturo Nava, prosigue Jiménez Jiménez, viene una recomposición de las fuerzas de El Yunque en Querétaro y por 1995, con la llegada de Francisco Garrido Patrón a Querétaro, estas fuerzas se reorganizan, se recomponen, y se integran al proyecto que él encabeza, a través de quien buscan nuevamente llegar al poder.

En la página 255 de su libro, el investigador cita al ex diputado federal del PAN, y posterior desertor del mismo, Gustavo Buenrostro Díaz: “…cuando Garrido gana la elección para la presidencia municipal en 1997, cumple lo pactado con los yunquistas, quienes tomaron el control político del Ayuntamiento y, además, resuelven su problema económico: a todos Garrido les dio “chamba”, coche, gasolina, buen sueldo y prerrogativas que nunca imaginaron (…). En pocas palabras, Garrido Patrón le cumplió al Yunque cuando fue presidente municipal. De este modo, sin pertenecer al grupo, se ganó su confianza y se colocaba, nuevamente, como la principal bandera del proyecto político yunquista rumbo a la elección estatal del 2003."

Gobierno yunque

Para Lauro Jiménez, ahora que El Yunque está en el poder, ocupa cargos en áreas estratégicas del gobierno: “en la secretaría de Gobierno, están Alfredo Botello Montes, Jesús Carlos Hernández y Felipe Urbiola; en la secretaría de Educación está una figura que es de un bajo perfil pero que participa decididamente en la actividad educativa, que es Raymundo Gómez, de los bárbaros del Norte como los llamaba Manuel Clouthier, todos están tratando de implantar un mismo objetivo: que la ideología de derecha, radical, se implante en los gobiernos locales… de alguna manera con Ignacio Loyola Vera (el primer gobernador panista de Querétaro) se empezaron a dar ciertos rasgos derechistas, pero éstos se dan con mayor énfasis en el actual gobierno de Francisco Garrido Patrón”.

El autor de El Yunque. La ultraderecha en Querétaro señala que hay un cambio fundamental en la práctica de esta corriente política en Querétaro: “porque ahora son gobierno, no oposición; antes trabajaban a través de expresiones como manifestaciones, movilizaciones, volanteos, pero, ahora, con todos los recursos públicos a su favor y teniendo un gran aliado como lo es la Iglesia Católica, a través del aparato gubernamental se dan otros esquemas de control, de moralización, derechización del gobierno. No perdamos de vista que muchas actividades, presupuestos, programas y obras no son divulgadas, no son conocidas porque no hay transparencia en la aplicación de los recursos, hay opacidad: Querétaro se encuentra entre los estados con menor transparencia, eso nos habla del control tan férreo que hay. La opacidad en la información le permite al gobierno manejar a discreción y con tendencias hacia el conservadurismo, actividades que tienen que ver con la educación, con el manejo de los recursos públicos que no son conocidos por la sociedad.

Además, asegura enfático, “hay un control casi absoluto de los medios locales donde la información tiene que ver, mayoritariamente, con las actividades oficiales, y los medios poco se ocupan de asuntos de interés general que preocupan a la sociedad; los espacios hacia las organizaciones no gubernamentales, hacia los grupos minoritarios, simplemente, parece que no existen en Querétaro. Y cuando los medios le dan atención a esos grupos marginales es para denostarlos y minimizar su situación porque tal parece que al gobierno no le importan los pobres. Algo muy preocupante, en ese manejo mediático, es que pintan un Querétaro en desarrollo y progreso, al que vienen inversiones y empresas, pero que contrasta enormemente con ese gran porcentaje de población que vive en condiciones de pobreza extrema.

“Cuando fue oposición el PAN luchó porque las cosas fueran diferentes, por un Querétaro donde no hubiera corrupción ni marginación hacia los grupos más vulnerables; hoy que el PAN está en el poder recurre a las mismas prácticas que el PRI llevó a cabo durante 70 años. Por eso hoy los queretanos e, incluso, los panistas doctrinarios, tradicionalistas, que lucharon por años por llegar al poder y hacer que las cosas cambiaran, hoy están en contra de su propio partido y en contra de su propio gobierno, porque no están de acuerdo con sus prácticas antidemocráticas o porque se lleven a cabo actividades de marginación, de ataque o de persecución a grupos marginales, a organizaciones sociales, tal parece que quieren con el poder del gobierno y del dinero, hacer que esos grupos, simplemente, desaparezcan, que no existan.

“Hay actos de impunidad que no pueden olvidarse: el caso de los asesinatos de Octavio Acuña; del Kikín, con la BMW; del señor de San Pablo, el que murió por una golpiza, al igual que Genaro Arres; el caso de la persecución de Cristina Rosas, esas son represiones y prácticas que tienden hacia la confrontación, minimizan a los grupos minoritarios, no permiten la crítica o aceptan la participación activa e incisiva de la oposición. Mantienen el control de los medios, de la oposición, de las instituciones que debieran ser autónomas, como el Instituto Electoral de Querétaro y la Comisión Estatal de Derechos Humanos. Los organismos empresariales no son críticos como lo hacían con el PRI, ahora son complacientes con el gobierno, por eso a nivel de los medios, de la imagen, parece que no pasa nada, por eso tratamos de llamar la atención, a través de este trabajo periodístico, de que la opinión pública y los medios nacionales, volteen a ver a Querétaro, que nos demos cuenta que las cosas no están bien.

“Me parece que se está repitiendo lo que sucedía entre 1995 y 1997, cuando la sociedad se estaba manifestando, inconformando y, en el proceso de 1997, simplemente se dio un voto de castigo al PRI, y fue así como el PAN llegó al poder, en medio de otras coyunturas a nivel nacional, pero hoy el escenario se está repitiendo: el PAN-Gobierno ha abierto varios frentes en contra de organizaciones sociales producto de demandas de luchas legítimas de estos grupos; yo sostengo también que el gobierno, a pesar de todos los recursos que destinan para la imagen, para la publicidad, para el control de los medios, no es posible que pudieran cubrir todo y decir que en Querétaro hay un paraíso, cuando en realidad hay una inconformidad, yo digo que hay un resentimiento social hacia el PAN, hacia el gobierno y hay una movilización silenciosa que se va a desencadenar y va a desembocar en voto de castigo al PAN, el próximo 5 de julio, cuando se lleven a cabo las elecciones en Querétaro". (www.buzos.com.mx)