Batidillo de "egos" y agresiones en la LVI
Sábado 12 de Diciembre/2009
Los citaron desde temprano, para que se sentaran junto a una Bandera Nacional, a su izquierda, y la Constitución Política local, a se derecha. Pero uno de ellos estuvo en desacuerdo y colocó el ejemplar de la Constitución en su izquierda. Y para que a nadie se le olvide que él es distinto de todos, el diputado José Luis Aguilera Rico les dijo en la Tribuna a sus colegisladores que es superior a todos. Y descalificó cuanto -según él- han hecho los pasnitas, y se invistió y se ungió.
-El "Burro hablando de orejas"-, se mofó después el diputado Juan Fernando Rocha Mier, del PAN.
Estaba aprobado entonces el dictamen de la Ley de Ingresos, cuando, sin saber cómop aprovechar el tiempo, a los diputados se les ocurrió hablar de sus problemas personales y de sus filias y de sus fobias:
-Cuando quiera, le doy clases- le dijo el convergente Aguilera Rico al panista León Enrique Bolaño Mendoza, y lo acusó de que no iba a clases en la Universidad, porque -dijo-, no se tituló. El albiazul prefirió la mesura, y no le hizo caso.
Y, a partir de entonces, la sesión de la LVI Legislatura del Estado tornó en batidillo. Pues los diputados empezaron a rasgarse las vestiduras: los del PAN decían que como ellos, nadie, y los de lPRI decían que aquéllos habían sido peores.
-Que nos digan dónde se quedaron los millones de pesos que se perdieron en algunos ayuntamientos -dijo el diputado cetemista Jesús Llamas Contreras.
Los dislates y las disgresiones continuaron, hasta que la diputada María García Péres, del PAN, les dijo que ella se avergonzaba de cuanto sucedía, y, educadora de profesión, quiso tocarles los bordes del entusiasmo y la dignidad: "Que nos distingamos de todas las demás Legislaturas". Nadie le contradijo.
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