SE REANUDA LA LIGAMX LEÓN VS MAZATLÁN

lunes, noviembre 27, 2006

YO TAMBIÉN HABLO DE LA CONGRUENCIA

Omar Carreón Abud

Leí con muchísimo interés el artículo del Maestro Aquiles Córdova Morán, aparecido en estas mismas páginas, referente a la congruencia en lógica, en política y, más particularmente, relacionado con la contradicción que existe en la táctica de Andrés Manuel López Obrador de diseñar un plan de lucha popular a mediano y largo plazo en contra de un régimen y, al mismo tiempo, impedir que la cabeza de ese gobierno, el presidente, entre en funciones. El planteamiento del Maestro Aquiles Córdova, como todos los suyos, es impecable, una espléndida lección de lógica y, sobre todo, de congruencia política. Su cátedra me animó a hacer unos planteamientos y, parafraseando a Emilio Carballido, yo también hablo de la congruencia.
También de la del PRD, del Frente Amplio Progresista (FAP) y de Andrés Manuel López Obrador. Difícilmente puede encontrarse un mexicano modesto y hasta uno de clase media que disienta del programa que esbozó López Obrador el pasado lunes 20 de noviembre cuando rindió protesta como “presidente legítimo”. Va a la esencia de los anhelos de los trabajadores sostener que debe haber una apertura de los medios de comunicación a todas las expresiones, que debe detenerse la hemorragia que nos causa la emigración, que se combata la injusticia, que no se aumenten los impuestos a los pobres y, sobre todo, que se afirme que “la democracia es el poder del pueblo, para el pueblo y con el pueblo”. No hay discrepancia, ni puede haberla.
No obstante, uno de los grandes reclamos nacionales a los políticos consiste en que la gente aprecia muy poca o ninguna congruencia entre lo que se dice y lo que se hace. El mundo del discurso poco a nada tiene que ver con el mundo real y, en ese sentido, la ocurrencia de la foxilandia sólo es el extremo más escandaloso. No distingo la realización de esas libertades para expresarse y existir para todas las expresiones políticas, no veo, como quisiera ver, la preocupación por combatir la injusticia y los abusos en contra del pueblo por parte de las agrupaciones de las que es parte e inspiración principal Don Andrés Manuel López Obrador.
Durante las últimas dos semanas, el Movimiento Antorchista en el Distrito Federal ha sido víctima de una embestida propagandística tendiente a eliminarlo con malas artes como una opción política para la gente pobre de la ciudad de México. En la zona de Cuautepec, en la delegación Gustavo A. Madero, un pequeño grupo de sujetos se dedicó a repartir panfletos infamantes. En ellos, se cataloga, sin ninguna prueba que lo sustente, a algunos dirigentes antorchistas en la zona como represores, corruptos, vividores, etc., etc. y se llama a la opinión pública a no organizarse con el Movimiento Antorchista.
Para entender este hecho, debe explicarse al lector que durante cerca de 10 años, varios cientos de familias humildes han vivido hacinadas en bodegas y en predios sin servicios y han estado solicitando al Gobierno del Distrito Federal que construya en ellos unidades habitacionales y les venda los departamentos a crédito, a lo que durante mucho tiempo el GDF se negó sin ninguna razón válida. En consecuencia, los afectados por esta actitud, se vieron en la necesidad de realizar, durante esos largos 10 años, innumerables mítines, marchas y plantones para reclamar justicia elemental. Quienes ahora reparten el volante calumnioso son un pequeño grupo de personas que, aconsejadas por la autoridad que sentía lesionados sus intereses por las protestas, siempre combatieron los esfuerzos de resistencia de las humildes familias tratando de reventar al movimiento desde dentro, mientras otros padecían en una lucha que parecía no tener fin, estas gentes se burlaban, se negaban a realizar cualquier actividad y, finalmente, hace aproximadamente dos años, cuando vieron que sus esfuerzos de esquiroles no daban frutos, se salieron de los predios y se fueron a vivir a otra parte. Pues bien, en uno de los predios, la construcción de una unidad habitacional empezó finalmente el pasado 12 de noviembre y la autoridad, patrocinadora al fin, quiso que los beneficiarios, quienes habían dejado parte de su vida en la lucha por una vivienda, se hicieran a un lado para que ocuparan su sitio sus agentes. ¿Usted, amable lector, hubiera aceptado? Los colonos antorchistas que han luchado diez años, tampoco.
Y esos agentes del gobierno son los que ahora hacen campaña en contra del Movimiento Antorchista. Son agentes del GDF por sus antecedentes y lo son por sus argumentos ya que llaman a los solicitantes de vivienda a presentarse solos ante el GDF y el INVI pues, según ellos, la organización popular no se necesita. ¿Y por qué lo de la congruencia? Porque nadie ignora que durante esos 10 años ha sido el PRD el que ha gobernado el DF, 6 de ellos, Andrés Manuel López Obrador. Porque a todo eso hay que añadir que apenas el domingo pasado, cuando un grupo de modestos solicitantes de vivienda se reunía en el Jardín Hidalgo en el centro de Cuautepec, unos sujetos que se identificaron como comerciantes del PRD les “prohibieron” que hicieran sus reuniones en ese lugar o, de lo contrario, los iban a “hacer mártires”. Termino haciendo un respetuoso llamado al Jefe de Gobierno, Alejandro Encinas, y al delegado en GAM, Francisco Chiguil, para que intervengan, se salvaguarden los derechos de los ciudadanos, se impida una agresión y se defienda la congruencia que tanto clama el pueblo pobre de México.

No hay comentarios.: