Recomiendan al Ejecutivo se investiguen atentados
Miércoles 14 de marzo/2007
Por Abel de la Garza
Asimismo, la Junta de Concertación Política se reunió este martes para emitir un acuerdo de exhorto y una recomendación al Ejecutivo para que investiguen puntualmente y a fondo los dos atentados que a la fecha ha sufrido el Alcalde de Tequisquiapan, Noé Zárraga Trejo. Así lo dio a conocer el diputado perredista, presidente del máximo órgano político de la Legislatura, Martín Mendoza Villa. “Que a través del Ejecutivo, de manera respetuosa, se le pida al Procurador el esclarecimiento de estos atentados, que pusieron en riesgo la vida del Alcalde de Tequisquiapan. Se le pide que este asunto se agilice y se tengan resultados para que no quede en la impunidad como otros casos que se han suscitado (…) No podemos seguir dejando que este tipo de atentados sobre Alcaldes o incluso ciudadanos, pongan en alerta al Estado
Mendoza Villa pidió no dejar fuera ninguna línea de investigación, entre ellas la que ha platicado con el Alcalde que se refieren a alguien a quien quizá no se le dio trabajo en la administración municipal o quizá una que incluye a personas que se han denunciado por desvío de recursos públicos.
“No tiene cuentas pendientes… no tiene enemigos. Es una persona sencilla desde su trabajo en la construcción. No es de quienes les guste traer guaruras. Él me ha dicho que no tiene rivales y si hay algún otro rival o enemigo, que no lo duda, al que por no haberle dado trabajo o que por haber denunciado un acto o alguna irregularidad, se siente agraviado, esté atentado en contra de su persona”.
Mendoza Villa se refirió incluso a la denuncia que ya se interpuso ante las instancias correspondientes de un desvío de recursos por más de 2 millones de pesos en la administración pasada de su correligionario de partido, Guillermo Herrera Trejo.
“Por 2 millones efectivamente, de la elaboración de unos reglamentos. Todo esto, efectivamente, sin afirmar de manera tácita porque nosotros no somos los investigadores”, dijo el diputado.
Apenas el 21 de febrero pasado, Noé Zárraga acusó como ‘cómplice’ al ex Edil Guillermo Herrera Trejo de este quebranto, con la siguiente declaración.
“No tengo por qué tapar a alguien que ha hecho mal al municipio (…) fue algo que se sacaron de la manga y es evidente que el Alcalde sabía de esta situación”.
El diputado Mendoza Villa insistió también en otro tipo de líneas de investigación.
“No pueden descartar ninguna investigación. La Procuraduría debe ir eliminando los móviles que puede haber. Puede ser una cuestión política, una cuestión personal, puede ser una cuestión dentro de su cargo, al haber destituido algunos funcionarios. Nada se puede deshechar. O que sea una revancha incluso antes de comenzar él como Alcalde en su actividad anterior. O meter su gabinete nuevo y no considerar a algunos que ya estaban. O simplemente que en las cuentas públicas o el manejo de los recursos de la administración anterior o anteriores, esté actuando en contra de quienes cometieron algunos actos e irregularidades”.
**********************
Le faltó a Martín mencionar otro móvil que sin duda en unos días (incluso horas) tomará más forma; que se puede tratar de un lío de faldas. Por eso, es mejor aguantarse un poco más en lugar de hacer declaraciones a lo pendejo como fue el caso de Martín Mendoza Villa y Pablo González Loyola, exigiendo con toda firmeza a la PGJE es esclarecimiento y a la brevedad, cuando salga a la luz la verdad, desearán que nunca se hubiera conocido pues sin duda representará otro madrazo al perredismo queretano, bueno, ya hasta Pablo está pensando en movilizar a sus 23 seguidores para presionar en búsqueda de que se resuelva pronto el caso del alcalde de Tequisquiapan.
Quien fue más conciente al comentar sobre los hechos en Tequisquiapan, fue Ramiro Trejo, quien dijo que fue una irresponsabilidad de parte del funcionario haber andado en un lugar desolado sin su escolta cuando ya había sido objeto de un atentado en menos de tres meses atrás.
Pero vamos a los hechos, a quién cree que engaña Zarraga Trejo, ‘me la trague todita’, declaró ayer respecto al supuesto mensaje que le había enviado un tal Juan Hernández para reunirse en un lugar despoblado y proporcionarle datos sobre el sindicato, y espera que nosotros también no la traguemos pero no será así; si tan sólo hubiera sido un poco más coherente en sus inventivas declaraciones tal vez algún sector si se la hubiera tragado. Elementos de la policía municipal declararon que la secretaria del edil (Sandra Jiménez Hernández) iba con él al momento del ataque.
Quien en sano juicio va a creerle que se reunió sólo con un desconocido y en un lugar deshabitado, y lo peor del caso, tratar de culpar en su primera versión, al Sindicato de Trabajadores de Ayuntamiento de Tequisquiapan, argumento que posteriormente fue cambiado por el de robo y ahora se desdice nuevamente y declara que puede ser una venganza por malos manejos de fondos.
Francamente ha creado todo un galimatías del que saldrá más madreado (políticamente) que los daños causado por los piquetazos que le dieron al calenturiento alcalde
Mendoza Villa pidió no dejar fuera ninguna línea de investigación, entre ellas la que ha platicado con el Alcalde que se refieren a alguien a quien quizá no se le dio trabajo en la administración municipal o quizá una que incluye a personas que se han denunciado por desvío de recursos públicos.
“No tiene cuentas pendientes… no tiene enemigos. Es una persona sencilla desde su trabajo en la construcción. No es de quienes les guste traer guaruras. Él me ha dicho que no tiene rivales y si hay algún otro rival o enemigo, que no lo duda, al que por no haberle dado trabajo o que por haber denunciado un acto o alguna irregularidad, se siente agraviado, esté atentado en contra de su persona”.
Mendoza Villa se refirió incluso a la denuncia que ya se interpuso ante las instancias correspondientes de un desvío de recursos por más de 2 millones de pesos en la administración pasada de su correligionario de partido, Guillermo Herrera Trejo.
“Por 2 millones efectivamente, de la elaboración de unos reglamentos. Todo esto, efectivamente, sin afirmar de manera tácita porque nosotros no somos los investigadores”, dijo el diputado.
Apenas el 21 de febrero pasado, Noé Zárraga acusó como ‘cómplice’ al ex Edil Guillermo Herrera Trejo de este quebranto, con la siguiente declaración.
“No tengo por qué tapar a alguien que ha hecho mal al municipio (…) fue algo que se sacaron de la manga y es evidente que el Alcalde sabía de esta situación”.
El diputado Mendoza Villa insistió también en otro tipo de líneas de investigación.
“No pueden descartar ninguna investigación. La Procuraduría debe ir eliminando los móviles que puede haber. Puede ser una cuestión política, una cuestión personal, puede ser una cuestión dentro de su cargo, al haber destituido algunos funcionarios. Nada se puede deshechar. O que sea una revancha incluso antes de comenzar él como Alcalde en su actividad anterior. O meter su gabinete nuevo y no considerar a algunos que ya estaban. O simplemente que en las cuentas públicas o el manejo de los recursos de la administración anterior o anteriores, esté actuando en contra de quienes cometieron algunos actos e irregularidades”.
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Le faltó a Martín mencionar otro móvil que sin duda en unos días (incluso horas) tomará más forma; que se puede tratar de un lío de faldas. Por eso, es mejor aguantarse un poco más en lugar de hacer declaraciones a lo pendejo como fue el caso de Martín Mendoza Villa y Pablo González Loyola, exigiendo con toda firmeza a la PGJE es esclarecimiento y a la brevedad, cuando salga a la luz la verdad, desearán que nunca se hubiera conocido pues sin duda representará otro madrazo al perredismo queretano, bueno, ya hasta Pablo está pensando en movilizar a sus 23 seguidores para presionar en búsqueda de que se resuelva pronto el caso del alcalde de Tequisquiapan.
Quien fue más conciente al comentar sobre los hechos en Tequisquiapan, fue Ramiro Trejo, quien dijo que fue una irresponsabilidad de parte del funcionario haber andado en un lugar desolado sin su escolta cuando ya había sido objeto de un atentado en menos de tres meses atrás.
Pero vamos a los hechos, a quién cree que engaña Zarraga Trejo, ‘me la trague todita’, declaró ayer respecto al supuesto mensaje que le había enviado un tal Juan Hernández para reunirse en un lugar despoblado y proporcionarle datos sobre el sindicato, y espera que nosotros también no la traguemos pero no será así; si tan sólo hubiera sido un poco más coherente en sus inventivas declaraciones tal vez algún sector si se la hubiera tragado. Elementos de la policía municipal declararon que la secretaria del edil (Sandra Jiménez Hernández) iba con él al momento del ataque.
Quien en sano juicio va a creerle que se reunió sólo con un desconocido y en un lugar deshabitado, y lo peor del caso, tratar de culpar en su primera versión, al Sindicato de Trabajadores de Ayuntamiento de Tequisquiapan, argumento que posteriormente fue cambiado por el de robo y ahora se desdice nuevamente y declara que puede ser una venganza por malos manejos de fondos.
Francamente ha creado todo un galimatías del que saldrá más madreado (políticamente) que los daños causado por los piquetazos que le dieron al calenturiento alcalde
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